La primera prueba en sastrería artesanal
2ª parte
En el post anterior (ver aquí) estuvimos hablando del pasado de los hilos, corte y picado de las entretelas, vaciado de las pinzas y posterior cosido de las mismas, para finalmente coser las costuras del tejido en delanteros, espalda y mangas.
En este, hablaremos del reentrado de los delanteros. Sin duda alguna es una parte fundamental de la prueba, ya que si no lo hacemos correctamente, podremos encontrarnos, una vez terminada la chaqueta, con unos delanteros que estén voleados y no caigan rectos, o con flojos o aguas en partes donde no queremos que estén.
Una vez que hemos cosido las costuras de los delanteros, cerramos el corte situado donde irá en un futuro el bolsillo de vivos mediante el denominado como punto pelota. Esta puntada recibe este nombre de la costura que tenían las pelotas antiguamente.
Colocaremos en plano el delantero y en primer lugar abriremos las costuras, posteriormente dividimos el reentrado en dos partes: del talle hacía el bajo y del talle hacia los hombros. Mojamos la parte inferior para ayudar al tejido a que adquiera la forma que estamos buscando, es necesario que la pinza del delantero coja una ligera forma de paréntesis en dirección a los ojales, de esta manera evitaremos ondulaciones en el canto. Para ello antes de apoyar la plancha en el tejido, en la altura del ojal del talle, deslizaremos un poco el tejido y situaremos la plancha encima de la costura, esperamos a que toda el agua se haya evaporado y sin arrastrar la plancha, la moveremos en dirección al ojal.
Como podemos ver en la fotografía, el movimiento que haremos con la plancha es casi un círculo, moviendo ligeramente el tejido en la dirección de la flecha, secando y fijándolo con la forma que nosotros estamos buscando. En realidad lo que estamos haciendo es arrastrar un exceso de tejido en dirección al talle.
Como detalle, hay que decir que no tengáis miedo de que el tejido se queme, trabajamos con tejidos naturales de gran calidad y aunque es cierto que no conviene olvidarnos de que tenemos una plancha a una gran temperatura, si no secamos por completo estas fibras, volverán a su ser de forma natural.
Una vez hemos reentrado la zona inferior, nos centraremos en la superior. En esta zona, podremos ver que tenemos una gran cantidad de flojo en la zona de la costura de pecho y posiblemente, en la zona de la sisa también (en la fotografía anterior hemos marcado estas zonas en colora amarillo). Todo este flojo tendremos que hacerlo desaparecer, ¿cómo?, con ayuda de agua y calor. Dependiendo del tejido con el que estemos trabajando, esta labor será mas o menos sencilla. No se comporta igual un tejido de mohair de 220 gr. que un paño de lana de 380 gr.
La primera zona a sumir será el flojo de la costura de pecho, lo mojamos bien y con la plancha en posición horizontal, para abarcar más espacio, subiremos hasta ocupar toda esta zona. Esperamos a que se seque y en caso de seguir habiendo flojo repetiremos la operación.
Tras el pecho, nos fijamos en la sisa, donde ayudándonos de nuestros dedos y con la plancha en posición horizontal sumiremos todo este flojo, para posteriormente repasar el resto de la parte superior del delantero en plano.
Una vez hayamos terminado el proceso de reentrado, miraremos la costura del delantero y confirmaremos que mantiene la forma que comentamos al principio. De ser así, el siguiente paso será hacer el bolsillo de pecho y el reentrado del las entretelas.
Las entretelas
Nuestro cuerpo tiene formas, no es plano, por eso al tejido y a las entretelas de damos unas pinzas para adaptarse a él, pero no son suficientes.
Ayudándonos de una tabla, dividimos en delantero en dos partes, de la pinza al frente y de la pinza a la zona del costado. Empezamos por el frente, situando la pinza justo en los 90º que forma la tabla con la mesa.
Al igual que en el delantero, queremos mantener la forma curva del la pinza en la dirección que comentamos. Por ello deslizaremos un poco la entretela en dirección a donde estarán los ojales y con ayuda de agua situaremos la plancha para mantener esa forma. Para profundizar la forma del pecho en la entretela, con nuestro dedo presionamos en el pecho para poder situar la plancha y conseguir la forma del cuerpo. Tras ello sumiremos el flojo que haya podido aparecer en la zona de la solapa.
En la zona del costado, la otra mitad de la entretela, lo principal será sumir el flojo que provoca la pinza que hemos hecho en la axila. Para ello, y con la entretela en los 90º de la pinza procederemos a sumirlo.
Una vez realizado este tramo, lo único que resta es planchar la zona inferior de la entretela, poniéndola en plano en la mesa. ¿Recuerdas lo que hicimos en el delantero con un movimiento casi circular, llevando el flojo desde el frontal hasta el talle? , pues simplemente sería repetir esta operación en la entretela.
Como habréis podido ver el proceso de reentrado, no es un proceso entretenido y delicado, en el que es necesaria una dosis de paciencia pero con 100 veces de repeticiones está controlado.
El siguiente, será el capítulo final de la primera prueba, donde veremos el hilvanado de las entretelas al delantero y el montado de estos a la espalda y manga. No te lo pierdas!!! Aquí, en vuestro cajón de sastre.
Agustín García